02 abril 2009

Ex alumnos

Pongamos por caso que se hace una reunión de antiguos alumnos de tu colegio / instituto:

A lo mejor, tienes ganas de ver a la gente con la que has perdido el contacto, gente con la que tuviste una relación -más o menos estrecha- y con la que congeniabas.
Bien, tiene sentido
Ve a la reunión y disfrutala.

Correcto.

Pero, y ¿si todo el mundo que va es desconocido? ¿Si te suenan vagamente su cara, o sus apellidos? ¿Si nunca hubo relación, o la que hubo fue mala?
Qué leñes ibáis a hacer en esa reunión??
A ver, me lo expliquen...

Digo, me lo expliquen a mí, que soy la que me planteo presentarme en la reunioncilla de marras.

¿Es absurdo? Lo es, efectivamente. Decídselo a mi subconsciente, que se empeña en sacar el tema una y otra vez...

Deberían llamar a esto el Complejo escolar acomplejado: Cuando estás en el cole y te sientes mal, se meten contigo, no te valoran, o directamente te ignoran, piensas "Ya nos veremos en la reunión de antiguos alumnos", con tono profundo y entrecerrando los ojos, así como si tuviéramos superpoderes que fuéramos a adquirir a los 18, y los demás no fueran conscientes (Bueno, así lo pensaba yo, que soy muy teatrera)
Y te imaginas en la famosa reunión, estando hiperbuena, siendo superejecutiva de altura, con marido e hijos ( así son las fantasías a los 13...) y pasta para aburrir. Y los demás "ohhhhhh, que injustos fuimos.." epatados totalmente.

Pero llega la reunión, y tienes casi 20 años más. Te has echado 40 kg a las espaldas. Eres del montoncillo. No, no eres ejecutiva, eres teleoperadora.
Lo de tener novio y casarse, ya no impresiona a nadie, y lo de la pasta... bueno, mejor lo dejamos.
Así no hay quien impresione a nadie, coño!. Si es que si todavía fuera Woody Allen, pues vale. Pero no, soy rara y neurótiva, estoy más rallada que una peonza, pero ni soy neoyorquina, ni tengo su rapidez mental.
Vamos, una pena.

Si ya es lamentable querer impresionar cuando estás moreno de UVA, y tienes un descapotable, imaginaos a qué nivel de patetismo se puede llegar si se va así, a las bravas.

Entonces, decidido: No voy a ir.

Menos mal que, con el tiempo, ser raro se convierte en tener personalidad.
Y menos mal que esto pasa hasta en las mejores familias: Quien no tiene gafas, está gordo, tiene un nombre raro, sus padres son pobres, o quien sabe qué...

Deberían prohibir estas reuniones. Uno termina el colegio, y sale corriendo para nunca más volver. No pides teléfonos a nadie. Recortas las fotos. Olvidas los nombres, y la serie de anécdotas lamentables que podrían hacer que te avergonzaras delante de cualquiera.
Pero llega ese desentierramuertos que es el Facebook y te encuentras mirando fotos de los demás.
208 fotos, en concreto. Ni una mia.

Si es que luego pasan las matanzas en los institutos de USA y Suecia. No me extraña. Si no tuviera mi equilibrio mental (jajaja) me habría ido a comprar una UZI, o algo.

1 comentario:

palito dijo...

No sabes cómo te comprendo... jo :(